En esta ocasión te comparto uno de los poemas más famosos del la leyenda del cine, «Cuando me amé de verdad», por Charles Chaplin. En escrito, Chaplin nos regala una increíble lección sobre el crecimiento personal.
El artista nos recuerda la importancia del amor a uno mismo, desde lo mas básico y humano, hasta encontrarnos con lo más sutil y profundo que es el alma, así lo comenta Chaplin en este manifiesto.
Cuando me amé de verdad, por Charles Chaplin
Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora correcta y en el momento exacto y entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene un nombre: AUTOESTIMA.
Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no es sino una señal de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es AUTENTICIDAD.
“No debemos tener miedo de confrontarnos… hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas”
-Charles Chaplin-
Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente y comencé a ver todo lo que acontece y que contribuye a mi crecimiento. Hoy eso se llama MADUREZ
Cuando me amé de verdad, por Charles Chaplin
Cuando me amé de verdad, comencé a percibir cómo es ofensivo tratar de forzar alguna situación, o persona, solo para realizar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o la persona no está preparada, inclusive yo mismo. Hoy sé que el nombre de eso es RESPETO.
Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas, situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. De inicio mi razón llamó esa actitud egoísmo. Hoy se llama AMOR PROPIO.
Cuando me amé de verdad, dejé de temer al tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. Hoy sé que eso es SIMPLICIDAD.
Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y con eso, erré menos veces. Hoy descubrí que eso es la HUMILDAD.
Cuando me amé de verdad, desistí de quedarme reviviendo el pasado y preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama PLENITUD.
Cuando me amé de verdad, percibí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, ella tiene una gran y valiosa aliada. Todo eso es SABER VIVIR.
Podemos concluir diciendo, que se trata de sentirnos bien para poder compartir con los demás, desde el bienestar y la plenitud, en lugar de hacerlo desde la falta y la necesidad.
Además, recuerda que no podemos dar lo que no tenemos; es vital reconocerse, cultivar el amor y la gratitud desde nuestro interior para que todo fluya.
No debemos tener miedo de cuestionarnos, de hecho hasta los planetas chocan y del caos suelen nacer la mayoría de las estrellas.
Charles Chaplin fue uno de los grandes genios del cine, un mito fundamental del siglo XX, en cuya filmografía abundan las obras maestras, llenas de imaginación y brillantez, que le han hecho ocupar uno de los lugares privilegiados de la historia del cine.
Además de esa lucidez multidisciplinar, en «Cuando me Amé de Verdad», Charles Chaplin nos regala unas penetrantes reflexiones para tener presente en el trayecto de nuestra vida.
Fragemento de El Gran Doctor por Chales Chaplin